Entumecimiento, dolores lumbares, en las manos, el cuello o las muñecas… ¿Te ha pasado? Si es tu caso, sigue leyendo este blog y descubre algunas formas de mejorar tu postura en el trabajo.

Luego de tantas horas de estar sentado en la oficina habrás notado que comienzas a tener ciertas incomodidades físicas, como dolor de espalda, de cuello, de muñecas o hipersensibilidad a la luz, además del aumento de los niveles de estrés, ansiedad y disminución de la concentración. Si no previenes estas molestias o síntomas iniciales puede terminar convirtiéndose en un problema serio y ocasionar daños severos a tu salud. 

Ya sea que estés trabajando en oficina o viviendo la experiencia del teletrabajo, es importante que mantengas una buena postura. De lo contrario, terminarás sintiendo tensión muscular en las muñecas y las manos, dolores lumbares, rigidez y entumecimiento de la nuca y del cuello, entre otras afecciones a largo plazo.

Aunque no lo creas, el sedentarismo es uno de los mayores causantes de enfermedades hoy día, esto se relaciona también con la postura y el hecho de que pasamos gran parte del día sentados frente al ordenador: monitores mal emplazados, pantallas muy altas o muy bajas, falta de espacio para apoyar las muñecas o reposar los brazos son los problemas más habituales, sea que trabajemos desde casa o en una oficina.

Por ello, en este blog te enseñaremos cómo erradicar algunas malas costumbres mediante x formas de mejorar tu postura en el trabajo:

6 formas de mejorar tu postura en el trabajo

1) Mantén los oídos alineados con los hombros

Alinear la espalda con el respaldo de la silla, hombros atrás y abajo, plantas de los pies apoyadas en el suelo, cabeza derecha, cuello, espalda y talones alineados. Esta es la postura ideal para un trabajo de escritorio. No obstante, la tendemos a perder encorvándonos y cruzando las piernas cuando nos concentramos en algo particular. Por esta razón recomendamos ser conscientes de tu postura repetidas veces al día y corregirla como se menciona al principio para evitar dolores.

2) ¡No trabajes desde la cama!

Si trabajas desde casa probablemente ya hayas tenido la tentación de trabajar un día desde la comodidad de tu cama. ¡Grave error! Trabajar desde la cama no solo te provocará dolores lumbares e insomnio (ya que los rayos ultravioletas inciden en el ciclo fisiológico del sueño), también podría influir negativamente en tu salud a nivel psicológico, ya que trabajar acostado desde cama indirectamente se asocia con problemas de depresión y fatiga al trabajar desde el mismo lugar en el que duermes.

3) Practica ejercicios para hombros y pecho

En nuestro blog sobre los beneficios de las pausas activas te mostramos algunos ejercicios sencillos que puedes realizar desde cualquier lugar de tu oficina u hogar para liberar tensión en distintas zonas del cuerpo, incluyendo la parte superior de la espalda, los hombros, el pecho y el cuello.

4) No te inclines hacia delante

Está bien si quieres hacerlo en un momento específico para visualizar mejor algo en la pantalla. Sin embargo, debes cuidarte de este tipo de posturas: la inclinación hacia delante por tiempo prolongado puede causar tensión e incluso dolor agudo e inflamación en el cuello, espalda y hombros, además de dolores de cabeza. Si en tu caso tienes algún problema de la vista lo más recomendable es que asistas a un oftalmólogo, estarás solucionando un problema en vez de generar dos. 

5) Usa un apoyo lumbar

Los cojines o almohadas de apoyo lumbar ayudan a aliviar el dolor de espalda y ofrecen un soporte que te ayudará en cierta medida a corregir tu postura, permitiendo que la columna vertebral permanezca en su posición natural cuando estás sentado o acostado sobre ella.

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6) Levántate y muévete cada tanto

El sedentarismo es el peor enemigo para quienes trabajamos desde casa o en una oficina sentados todo el día. Por ello, recomendamos que cada 30 o 45 minutos te pares de tu asiento y des un par de vueltas rápidas por la casa, estires la espalda, las manos y las piernas, ya sea para realizar una mini sesión de pausas activas o simplemente para buscar un café. 

Conclusión

Como ves, un trabajo de oficina o desde casa en un escritorio conlleva más que solo teclear y ver pantallas. De hecho, es una de las modalidades de trabajo más complejas si no cuidas tu postura. Para evitar consecuencias a largo plazo te recomendamos poner en práctica todos estos consejos y, aunque al principio sea incómodo mantenerte erguido y activo, te aseguramos que podrás adaptarte y será un punto a favor para tu salud mental y física.